lunes, noviembre 07, 2005

Antes ya fue N´Kono


Mr. Willy habla de Etoo. Pero si Etoo juega hoy en el Barça se debe a que un día lo hizo N´Kono en el Español.
N´Kono ha pertenecido a la clase de guardametas que se dejan sentir por sus grandes paradas, sí, pero también por ser negro, camerunés y jugar con pantalones largos. Por romper. Claro, hablamos de los años ochenta en España, de un fútbol todavía no bosmanizado y una sociedad que no veía inmigrantes en el metro. N´Kono era exótico y ágil como nadie. Ambas cosas como nadie.
Todo empezó con aquella selección 82 de Camerún, encabezada por él. Ése fue el primer paso para que un día, años más tarde, el Madrid apostara (poco) por Etoo. Porque Etoo es un producto de la pasión de Camerún tras su Mundial 90 (de nuevo con N´Kono y Roger Milla) y ese Mundial consecuencia del trabajo realizado durante una década. Italia fue un éxito para aquella selección de jugadores descarados; se convirtieron en ese equipo que en un mundial repesca a los aficionados que han perdido a su selección en rondas anteriores. Y además jugaban bien.
Recalcamos, Etoo no sería, porque Camerún no lo habría dado, si jugadores como N´Kono no hubiesen alcanzado ese nivel. La cantera y la afición se logran con hitos, con épica, pero dilatada en el tiempo. Quince años de buen fútbol como abono.
N´Kono también, sobre todo, caló en España. Contribuyó a la final UEFA del Español (con Clemente a la defensiva, según los críticos) y durante muchos años fue un cromo cotizado. Cuando todos nos pedíamos ser N´Kono al jugar, no hacíamos sino convertirlo en el símbolo que ya era: el del fútbol africano.
Y que sude Etoo para quitárselo.